lunes, 5 de noviembre de 2012

Madrid Arena, polvo neuronal

Como nos gusta hablar en caliente, como nos encanta escandalizarnos, como nos encanta llorar las muertes y pedir costantemente justicia y responsabilidades. Eso sí, siempre y cuando no se nos hable de nuestra responsabilidad.

Cada vez que hay un accidente ahí van corriendo los medios de comunicación, como buitres (que en muchos casos son), a por la carnaza, a por la audiencia. Y todo el populacho empieza a clamar por justicia, a veces pedimos que se cumpla la ley, otra queremos cambiarla a medida porque en este país hablar y decidir en caliente es mucho mas normal que discutir en el bar. Y esto se retroalimenta.

Cambiemos las leyes pues, para tener a niños de 10 años en la cárcel, con más inocentes linchados por la opinión pública y los medios, para estar todos seguros y controlados. Pero los políticos corruptos tranquilos.

Porque, no nos vamos a engañar, queremos que el gobierno y las autoridades nos den todo mascado y no nos tengamos que preocupar por nada. Queremos ir a 200km/h por las carreteras y sí pasa algo es por culpa de que las leyes no son duras, las carreteras están mal, o por culpa de la crisis no tenemos el coche que queremos. Pero ¿nuestra? Que va, nosotros cumplimos todas las normas ¿a que sí? y no conocemos a nadie que corra en el coche ¿a que no? y si fuese así iríamos corriendo a denunciarlos ¿no?. Pero claro nunca pasa nada, hasta que pasa y entonces ya ni nos acordamos de nosotros mismos, solo paja en el ojo ajeno.

Pues así estamos, nunca nadie fue a un macrofestival, nunca nadie fue empujado en un gran evento, ya sea el concierto de Bisbal, de los Rolling o en las del pueblo. Nadie vio borrachos liandolas en cualquier recinto. Nos sorprende a todos, ¿como puede pasar esto? Nosotros no intentamos colarnos nunca en festivales, ni colar botellas de cristal ni nada. Pues resulta que sí, igual las medidas de seguridad no son las suficientes, pero estas no están para prevenir accidentes por temporal, si no de nosotros mismos. Y a nosotros no se nos la sopla lo que nos digan.

Los accidentes ocurren, y seguirán ocurriendo. Podéis dramatizar lo que queráis, y también podéis quedaros en casa, por si acaso.

Las medidas populistas como prohibir festivales son muy efectivas, pero mucho mejor solo salir de casa para ir al trabajo, así estaríamos todos mas seguros, y algunos, más contentos y ricos.

Eso sí, en los encierros (incluido vuestro amado San Fermín), como son tradición  no pasa nada aunque mueran unos cuantos cada año.

Lo dicho país de pandereta tomando decisiones que dan risa, o miedo.

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